La mirada se me va, pensando si lo que veo es realmente lo que veo... Eso que percibo me encanta transformarlo, soñar en otros colores, que lo que esta triste no lo esté... Esa lejanía al imaginar que se puede lograr pero el recuerdo me lleva a pensar que algún día yo fui un sueño y ahora soy una realidad en proceso...
La fe es mirar lo que es invisible... La fe no es para muchos, es para los valientes que se pueden llamar locos.
Las mayores locuras del pasado son las realidades que han cambiado el mundo hoy... La utopía del ayer es la realidad de hoy.
Los grandes hombres que han pasado en la historia tenían algo en común; creían en una visión, tenían fe...
Pero hay que tener mucho cuidado en que crees, la fe es creer y tu decides en que crees... Cree en lo que te lleve a ti y los demás a crecer y avanzar. (No sólo a ti, no seas egoista).
Cree en Dios, pero creele mucho más a Dios, es Él el que puede guiarte y llevarte a grandes cosas, pero sin fe no podrás ver a Dios, como te va guiar? Y como te va mostrar lo que es tuyo?
La fe sabe esperar y obedecer porque ambas traen bendición y lo que Dios más anhela es bendecirte... No es fácil, pero es más seguro... Prefiero caminar sobre el agua por fe, que quedarme dudando en el barco y no vivir algo nuevo...
Puedes tener fe, pero tienes que saber mantenerla, la fe para que crezca se DEBE probar... Tu cuerpo para que se fortalezca se debe ejercitar y ese proceso duele.
La fe quita la vista física para ver lo imposible...
Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve. Hebreos 11:1
Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible
Marcos 9:23
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