El espejo, más que un objeto, se convierte en una tortura para muchos, cuando observamos lo que no nos gusta, lo que tenemos de más y no que, definitivamente, lo tenemos.
No mientas... Alguna vez en tu vida ha habido algo en tu cuerpo que no es de tu gusto; tu cabello, tu cuerpo, tu color de piel, tus ojos, tu estatura, tus manos. Etc.
Llega la frustración por no tener el poder de cambiar la situación y de ahí nace la comparación que nos hacemos con las demás personas que tienen lo que nosotros no tenemos.
Cuantas personas no hacen cosas sin sentido con tal de lograr la "figura perfecta", figura que no existe porque no existe en el mundo el estándar perfecto para moldear el cuerpo, sencillamente, porque todos somos de una contextura física diferente.
Primero tenemos que saber que tipo de cuerpo tenemos para no sentirnos frustrados por el cuerpo del vecino o de la chica que tiene un cuerpo de Barbie. Existen tres tipos de cuerpos; el ectomorfo, el endomorfo y mesomorfo.
El ectomorfo son cuerpos delgados, peso normal y que a pesar de que pueden consumir mucha comida, su peso mantiene estable.
El endomorfo son cuerpos con mayor masa muscular y tienden a tener crecer y aumentar más de peso al comer.
El mesomorfo es el cuerpo medio, tiene una buena regulación de peso y musculo. Es el punto medio de los dos cuerpos.
Debemos saber que tipo de cuerpo tenemos para saber que cuidados tener, no podemos hacer ni demasiado ejercicio, ni hacer muy poco, ni comer mucho, ni muy poco.
Dios a cada uno nos hizo únicos, pero nos hizo con la capacidad de desarrollarnos en todas las areas, y eso, incluye el físico. Cuidarnos es muy importante, tener una buena alimentación (no es que sea pecado comer algunas comidas, es por salud y lógica), hacer ejercicio regularmente y con constancia (busca asesoria), hacer cosas diferentes (no seas rutinario), no te compares con nadie, eso te va lastimar y vas a encontrar que tu no tienes todo lo que el otro tiene como también, el otro le falta algo que tu tienes, Ten identidad propia!
Dios nos ama tal y cual somos, pero nos ayuda a mejorar cada día, no debemos subestimar ese amor con lo que los demás dicen que somos. Si no les agradas así como eres, no importa lo que te hagas por cambiar, siempre seguirán criticándote algo, inclusive lo que cambiaste por ellos.
Valorate, amate, cuidate, ten identidad, ama a los demás como son, elogiate y siéntete amado(a) por Dios porque te hizo de una manera particular.
Si te aceptas como eres, no tendrás que cambiar nada, porque los otros van a notar el cambio en ti.
1 Corintios 6:19-20
¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños; 20 fueron comprados por un precio. Por tanto, honren con su cuerpo a Dios.
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